Será que yo soy muy rara, o será que no soy capaz de entender cómo puedes reducir tus aspiraciones en la vida a una única persona, cómo no puedes enamorarte todos los días de ti misma, de las miradas en el autobús, del olor a tierra mojada o a comida casera recién hecha, cómo no puedes enamorarte de tu perro cuando se pone pesado porque quiere jugar contigo o cuando estás sentada y te lame la cara...
Con todo esto, no quiero decir que no sea necesario encontrar a la persona que te complemente o que te haga feliz, pero no creo que sea tu único objetivo en la vida, ya que una persona a tu lado puede ser lo más importante, pero no lo único en lo que centrar tu vida.
Este año, San Valentín sí que me ha traído muchas ganas de enamorarme o de encontrar a esa persona especial, pero también me ha hecho darme cuenta de que puedes estar enamorada de la vida, y serás tan feliz o más que centrándote en una única persona para sentirte realizada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario